Lunes, primer día de
la semana. Eloísa mira expectante por enésima vez el reloj. Son las once de la
mañana. El cartero llega con retraso, no es su costumbre.
Desde hace un año,
cada lunes a las once en punto, suena el timbre de la puerta del segundo C.
Eloísa se da un tiempo para recomponerse el pelo y humedecer sus labios, luego
abre. Tras pronunciar un: buenos días, dulce y suavemente, sin apenas levantar
los ojos de esas manos de largos dedos, toma la carta que ella misma se ha escrito
tres días antes.
que pena tener que llegar a eso...lo que hace la soledad. Muy bueno
ResponderEliminarqué bella historia, que mantiene viva a su escritora
ResponderEliminarMuy triste la soledad, sobre todo si no se sabe llevar con alegría.
ResponderEliminarBESICOS.
Muy guapo tenía que ser el cartero...el que viene a mi casa, es feo, rechoncho, y antipático...por eso no le abro.
ResponderEliminarMuy bueno, San.
Tendra que preguntarle algo... muy tierno
ResponderEliminarUn abrazo
Jaja, los trucos de las mujeres son infinitos.
ResponderEliminarMe hizo reir el texto.
Saludos
Alimentar la ilusión desde la soledad... Bonita historia, San
ResponderEliminarBesos
Yo también creo que el cartero era el objetivo.
ResponderEliminarY él, seguramente iría, aun sin carta, quizá a disculparse por no llevarla...
Un mismo texto para dos historias. Bien puede tomarse por la via de como asegurarse ver al guapo cartero, bien puede hcernos ver la tristeza del que se escribe a si mismo para vivir la ilusion.
ResponderEliminarUn buen ejercicio con un gran planteamiento.
Un beso !!!!
Por mi casa el cartero ya casi no viene, y si viene seguro que es un viejo feo y gordo.
ResponderEliminarBuen truco, mirá que astuta Eloísa ...
;)
Dicen que el cartero siempre llama dos veces, en el caso de Eloisa lo hace cada lunes, que tenga suerte, habil forma de abrir puertas al deseo y de paso entrenarse con las letras.
ResponderEliminarBuen relato corto, buen final sorprendente y amable, dulce.
Besitoooos
Ja jajaj que bonito, cuando he leído que se arreglaba el pelo y eso, ya me he imaginado que ella no esperaba las cartas, si no al cartero jejeje ;)
ResponderEliminarUn Beso.
¡¡¡Que historia más triste!!!
ResponderEliminarQue pena sentir tanta soledad.
Un abrazo fuerte
¡¡Qué inteligente!!
ResponderEliminarun abrazo :)
¡Que bonitoooooooooooooo! soy una gran admiradora de los micro relatos, para mí es mucho más dificil decir tanto con tan poco. Me encantó. Eres un genio.
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