Mujer (no es el
título)
He
tardado un tiempo en ser consciente de que el mundo real no es el que vive en
mi cabeza, si no el que vive bajo mis pies. He tardado en entender que para
alcanzar el mundo que sueño, antes hay que pelearlo. Entonces esos dos mundos
serán uno, como yo soy una, cuando pienso, siento y digo la misma palabra. No
quiero justificar las injusticas, ni los abusos sufridos, creo que son
acontecimientos que han servido para
llegar hasta donde estoy ahora. He aprendido y he facilitado el aprendizaje a
personas que a lo largo de mi vida han pasado por mi lado o han convivido
conmigo. Creo que lo importante es dormirse por la noche con la conciencia de
que cada día se ha hecho lo que se tenía que hacer. El ayer es una referencia,
un recuerdo que me ha servido para ser como soy, ni mejor ni peor que nadie,
solo soy como tengo que ser. Esto lo digo ahora que noto como la vida se
evapora en forma de corazoncitos. Si alguien me lo hubiera contado antes…
Muchas más historias de mujeres en casa de Inma.
Mejor decir, en este 8 de Marzo reivindicativo, siendo mujer, que lo bueno es dormirse por la noche, con la conciencia de haber hecho lo que se tenía que hacer y... lo que te permiten hacer, en esta sociedad diseñada para el hombre.
ResponderEliminarBesos.
Creo que has dicho algo muy importante y es ser tú misma aún equivocandote , pero amiga también está muy bien irse a dormir y saber que lo que has hecho ha servido para ti.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo .
Pasamos los primeros años haciendo, cumpliendo, justificando, cuando nos detenemos y empezamos a vivir ya hemos gastado tiempo pero como dices ese gasto nos ha traído hasta estos disfrutes. Ser mujer es maravilloso. Un abrazo
ResponderEliminar" para alcanzar el mundo que sueño, antes hay que pelearlo"
ResponderEliminarEsa es la gran verdad, no se cambia el mundo con declamaciones, sino con poner el cuerpo y la vida en un esfuerzo digno.
Besos
Lo que importa no es ser mujer con derechos de los hombres...lo que importa es poder ir a dormir sabiendo que lo que se hace es lo correcto...no es ser como ellos..no es tener sus derechos...es poder ser un buen ser humano ...besoss
ResponderEliminarCoincido contigo en eso de acostarse con la conciencia de que se ha hecho lo que se tenía que hacer.
ResponderEliminarYo me acuesto bastantes veces así, pero con la alegría y satisfacción de anoche, no.
Un beso enorme.
Me quedo pensando en esos corazoncitos evaporados... ojalá no duelan.
ResponderEliminarUn abrazo
Jolines que baño de realidad en tan pocas frases..Mi felicitación.
ResponderEliminarbesos
Lo importante es ser una misma, y actuar en cada momento como una piense.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Besos.
Muy bueno leerte suavemente
ResponderEliminarDices Creo que lo importante es dormirse por la noche con la conciencia de que cada día se ha hecho lo que se tenía que hacer
Y aplaudo a quienes piensan y lo logran
Cariños y buen fin de semana
Un texto muy dulce... con principios, con sabiduría... La primera frase me encanta y es tan real!
ResponderEliminarBss
cuando se es joven puede creerse que todo vendrá por que si. En la madurez te das cuenta que nada ni nadie te ha regalado nada. Estan equivocados todos aquellos que piensan que los merecimientos personales son un derecho
ResponderEliminarLa inocencia de los primeros años nos impide ver la lucha que nos espera. Despues, como bien dices, basta con ir a dormir con la sensación de haber hecho lo que tenias que hacer. Un escrito que es una gran reflexión, gracias por estar aqui, besos.
ResponderEliminarLa realidad soñada, Chelo, se construye sobre la realidad vivida. Si no tuviéramos sueños y deseos, posiblemente no nos esforzaríamos en crecer y avanzar. Con los pies en la tierra, si, sin sueños, no. Esa pelea diaria es la que nos permite dormir a pierna suelta (aunque no siempre).
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Qué buen escrito San, de principio a fin. Sin duda, es la actitud que nos permite vivir de una mejor manera.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me gusta la coherencia de pensar, sentir y decir.
ResponderEliminarBeso de hombre.