Escondido tras la alegría de otros, la vio llegar.
Toda la semana anduvo ideando mil maneras de separarla del grupo de amigos, que
tan bien la protegían. La quería solo para él, aunque fuera un instante que
durara toda la vida. La diferencia de edad, no era obstáculo insalvable, deseaba
tenerla cerca, escuchar su risa desenfadada, cómplice y cariñosa. Deleitarse
con la visión de la cadencia de sus ademanes, mientras le contaba lo que había
hecho en el patio del colegio. La sabía traviesa y juguetona y a medida que
ella le contara, él iría imaginando cada una de sus palabras. La tarde fue un
ir y venir, de atracción en atracción. Nubes de algodón rosado, manzanas
caramelizadas, casetas de tiro, griterío, algarabía… Cuando la noche cayó y la
luna derramaba su luz, ella se distanció tres pasos, quedándose fija frente al Pozo
de los Deseos. Sobre su cuello desnudo, sintió un soplo cálido que la hizo
estremecer. Después agarraron su mano. Feliz, cerró los ojos y pidió un deseo.
Hoy, aún, sus manos siguen cogidas a las de él.
Otros pozos esperando monedas en la entrada de mas abajo.
Un deseo cumplido y más que cumplido, porque aún siguen juntos con lo difícil que es eso hoy día.
ResponderEliminarA veces las grandes diferencias de edad en cuestiones de amor resultan la mar de idóneas para la felicidad de las parejas habida cuenta que al final de dichas historias los hombres acaban buscando a una madre en sus esposas y estas a un padre en sus maridos. Bueno, esto al final, muy al final de los romances, se suele considerar una manera de "acomodación inconsciente". Bss.
ResponderEliminarMe encantan esas historias de cuento... ese momentazo ummm!
ResponderEliminar:D
Besos abisales
San has relatado una historia muy especial aunque parezca común. Una cosa es que se cumpla un deseo de amor y otra es saberlo cuidar, lo segundo depende de nosotros y es donde toma sentido.........
ResponderEliminarPues vaya un tío posesivo jajajajaja me encanta lo del cuello.... este es mi jueves http://elarpadener.blogspot.com.es/2013/07/pozo-de-los-deseos.html : )
ResponderEliminarParece que los deseos eran compartidos, así es el amor, caprichoso...
ResponderEliminarBesos!!
Este pozo de los deseos es eterno. Me gustó como el amor desde niños o al menos, ella sí era una niña cuando ambos se enamoraron, les unió para siempre. Este es un verdadero pozo de los sueños que cumple todos los deseos que se lanzan a su vacío.
ResponderEliminarUn abrazo
Son bonitas las historias felices, se había originado una atracción que terminó siendo mutua
ResponderEliminar,ella expreso su deseo frente al pozo de los deseos comenzando pronto a caminar juntos por una nueva vida.El tiempo dirá, pero esta etapa no se las quita nadie.
Un beso San.
Mágico aquel pozo de los deseos y una suerte que aún hoy las manos de ambos sigan cogidas. Me gusta. Un beso.
ResponderEliminarUn deseo de amor, el más bonito que hay, y sobre todo de amor eterno, que es el más dificil que se de, porque implica darse completamente a esa persona.
ResponderEliminarBonito deseo
Un abrazo
He tenido la sensación, dulce San, de que el pozo de los deseos existe, basta con jugar a creerlo y el cuento se hace realidad mágica a pesar de cualquier pesar. Besito contento y retornado.
ResponderEliminarEl soplo ese que da vida creo que es lo más dulce del relato.
ResponderEliminarUn beso.
Buena finta le has dado al relato, segun iba leyendo parecia un verdadero caso de acoso infantil, pero introdujistes al Pozo de los Deseos y todo torno en cariño , lealtad y camarederia a lo largo del tiempo.
ResponderEliminarComo siempre.... sorprendiendo.
Un beso :-)
Quién le dice No a un Deseo...
ResponderEliminarPrecioso relato, la vida se palpa y el amor se siente...
Besos que tienen Deseos propios
Que romantico, que lectura mas boonita.!!!!
ResponderEliminarMe haces pensar en mi nietecita mayor y en su amigovio!!!!!!!!!
Cariñosmil!!!!!!!!
Cuánta ternura... Un relato cadencioso, como el mismo amor que describe...
ResponderEliminarUna abrazo
Qué bueno, si fuera tan fácil, no????
ResponderEliminarLindo relato, lleno de esperanza.
Te invito a visitar mi blog.
Cuando tiene que ser...jeje.
ResponderEliminarLindos relatos estoy leyendo este jueves a consecuencia de tu propuesta, San. Felicitaciones!
Un abrazo
Muy bueno, conciso y estimulante. Esta vez sin sorpresas sucedió lo que tenía que suceder, lo que ambos desearon. Conozco los efectos de ese soplo cálido mientras ves alejarse en la oscuridad la moneda virtual del sueño deseado... y esperas a que se cumpla.
ResponderEliminarBesos
Me ha encantado, me has hecho llorar ¿ te lo puedes creer?
ResponderEliminarExcelente relato!
ResponderEliminarAbrazos.
¡¡ Es el Céfiro el que sopla, es la luna la que confunde, son las manzanas rojas recubiertas de caramelo las que endulzan,son las palabras las que...
ResponderEliminarPidamos unos pinchitos con pan de pueblo !!!
Besos
una historia muy tierna, me ha hecho estremecer, hasta me han dado ganas de volver al colegio y pedir ese deseo que quedó pendiente por culpa del miedo y de la inseguridad, que peste es ser un niño, creo que en cierta parte, fue la época más tonta de mi vida..... besos!!!!!
ResponderEliminarSan: esas manos que permanecen enlazadas, es un precioso deseo en sí mismo, que nos trasmite esperanza. Dulce relato, tan dulce como ese precioso soplo de vida.
ResponderEliminarUn fuertísimo abrazo y que tengas muchos deseos cumplidos y por cumplir!!!
Será la falta de sorpresas lo que me ha sorprendido, porque sencillamente todo resulta tan bonito que, eso, sorprende. Y gusta.
ResponderEliminarBesos.
Hummm yo quiero encontrar un pozo así, que me realice todos los deseos instatáneamente. Lindo relato SAN.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
Es tan bonito, que dan ganas de llorar! Precioso!!!
ResponderEliminarTu soplo creador me ha hecho estremecer a mí.
ResponderEliminarUn beso.
Hermoso y tierno relato. Me gustó mucho ese final feliz.
ResponderEliminarUn beso.
Un lindo relato que me ha emocionado Sam. Un saludo.
ResponderEliminarMucha ternura en tu relato. Me suena familiar el final. Besos castos y puros.
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